Cómo se pagan los anuncios en Ads
Existen tres metodologías que ofrece Google para pagar los anuncios. Lo ideal es elegir aquella alternativa que esté más alineada con tu objetivo de campaña.
- CPC: Costo por clic. El anunciante únicamente pagará por cada clic que se haga en su anuncio.
- CPM: Costo por mil impresiones. El anunciante pagará un costo por mil impresiones, es decir, por cada mil veces que se muestre su anuncio, independientemente si se clickea o no.
- CPA: Costo por adquisición. El anunciante indica un CPA objetivo, es decir un costo que le es rentable para su negocio, y Google ajusta las distintas ofertas de CPC para acercarse lo más posible a ese CPA establecido (pero no es seguro al 100% que vaya a conseguir conversiones por ese costo).
Para una campaña de branding en la que se quiere dar a conocer la marca, quizás el objetivo establecido apunta a que más personas vean esos anuncios, dejando de lado la cantidad de clics. En ese caso, sería acertado elegir la opción de CPM.
En cambio, si el foco de la campaña es generar tráfico a la web, lo ideal podría ser elegir el Costo por clic y así pagar solamente cuando alguien clickee en el anuncio y lo redirija a la web.
Por otra parte, si el anunciante es un proyecto que se encuentra en la etapa de lanzamiento, es preferible optar por CPC ya que el CPA suele rendir bien si ya se cuenta con un historial de ventas en los últimos meses.
Subasta de Google
Una vez que ya definas el costo por el que estás dispuesto a ofertar y publiques los anuncios, entras en el juego de la subasta de Google.
Cuando se efectúa una búsqueda, Google realiza una subasta para definir qué anuncio mostrará y en qué posición ubicará a cada uno de ellos. Previo a dicha búsqueda, cada anunciante ya habrá realizado una oferta de CPC máximo, donde le indicó a Google cuánto estará dispuesto a pagar como máximo, por un clic en esa palabra clave.
Además de ese costo, Google toma en cuenta otras cuestiones al momento de definir la posición de los anuncios que muestra. Algunas de esas cuestiones son la relevancia del anuncio, la calidad del mismo, los links que contiene, etc.
Volviendo a la oferta por el clic, en la subasta gana un anunciante que, a la hora de pagar realmente por el clic conseguido, termina abonando el monto mínimo que supera al anunciante que ofertó por debajo. Esto se define como CPC real.
Es decir que, si el anunciante A ofertó $10 por una palabra clave, y al anunciante B ofertó $8 por la misma palabra clave, como resultado, el anunciante A terminará pagando $8,01 luego de la subasta.